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MOLAMOL///BREAKFUNK

La música del pasado remite a experiencias hieráticas, solemnes, estáticas. Al digitalizase, la música del 202x se volvió mucho más líquida.

Dicha digitalización de la experiencia audible he generado que acciones como el scrolling, el zapping, el remix, y el hiperreferencialismo predomine en los géneros que aparecen, que spawnean de un momento a otro acaparando los reflectores del underground: imágenes no visuales que apelan a música ya existente, al reciclaje, a la curaduria, a la depuración/al debugging.

 Molamol se sumerge en la liquidez de la música, a través de una inmersión cuasi-religiosa, reuniendo feligreses frente a su consola, generando música visual para un público ávido de saturación; música para un Sísifo cuya condena es buscar sampleos por toda la eternidad, aceptando su destino con alegría y sensibilidad.